La Corporación

Título: La Corporación

Autor: Rob Hart

Páginas: 475

Editorial: Penguin Random House

¿Y si las empresas tecnológicas fueran el verdadero Gran Hermano?

Un thriller inquietantemente verosímil sobre el futuro que nos aguarda.

El mundo ya no es lo que era. La violencia armada, el desempleo y el cambio climático lo han convertido en un polvorín inhabitable. En medio de todo ese caos, Cloud, una poderosa corporación tecnológica, se erige como salvadora. No solo pretende vender a los ciudadanos cualquier cosa que necesiten, sino convertirse en un hogar para ellos. A cambio, tendrán que trabajar. El trato parece justo, pero las apariencias siempre engañan.

Paxton jamás pensó que acabaría empleado como guardia de seguridad en la compañía que arruinó su vida y mucho menos que se mudaría a sus instalaciones. Pero eso es justo lo que ha hecho. Y, teniendo en cuenta cómo se sobrevive fuera, no suena como una mala opción.

Allí ha conocido a Zinnia, que podría haberse enamorado de él, pero que tal vez solo esté utilizándole para sus propios fines. Porque en Cloud, pese a su resplandeciente aspecto, nada es lo que parece y ambos van a descubrir lo lejos que la corporación está dispuesta a llegar... para hacer del mundo un lugar mejor.

¡Buenassss! Lo primero, dar las gracias a Babelio por darme la oportunidad de leer esta distopía, os recuerdo que podéis participar en Masa Crítica vosotros también y uniros a la comunidad literaria que han creado que, además de web, también tiene una app muy fácil de usar. Dicho esto, empezamos con la reseña...

La Corporación es una distopía que nos sitúa en un futuro que no parece ser tan lejano, donde el mundo está en gran medida controlado por una empresa tecnológica llamada Cloud. Antes de empezar con la reseña os voy a contar cómo está este pequeño mundo construido y cómo es manejado. Esta empresa tiene una especie de recintos que vienen a ser lo mismo que una gran ciudad amurallada y edificada en todos los rincones. A ella se puede acceder a través de unas entrevistas de trabajo que te darán acceso a un puesto que te asignarán en relación a tu perfil y trabajos pasados. Cada trabajo está relacionado con un color de polo, los azules serán los encargados de seguridad, los marrones son equipo técnico, los rojos reparto, etc. Esta gran empresa que más que otra cosa parece una gran ciudad, como ya he mencionado, está dirigida por Gibson Wells, quien llevará la voz en algún que otro capítulo y nos irá contando cómo son sus días mientras ve acercarse a la muerte. Gibson fue el encargado de fundar y llevar a lo más alto a Cloud, absorbiendo a la gran mayoría de empresas y destruyendo a los pequeños emprendedores. Aquí es donde veremos el conflicto moral de este mundo que ofrece protección a cambio de... ¿tu libertad de elección? Eso parece.

Es un mundo capitalista llevado a su máximo nivel, una estructura movida por el dinero de forma exagerada, donde te ofrecen prácticamente nada a cambio de trabajo duro (que veremos que llega incluso a poder considerarse explotación) y tu anulación como persona en cuanto a tu poder decisorio. Hay muchísimo que decir sobre este mundo distópico que ha creado Rob Hart, es realmente lo más interesante de la novela y lo que más invita al debate y la reflexión. Mediante los capítulos de Gibson conoceremos una voz que defiende el mencionado sistema y nos explica por qué está diseñado como lo está, es decir, la justificación. Luego somos nosotros los que tendremos que decidir si un sistema en el que nos controlan mediante relojes y un método de puntuación de 5 estrellas imposibles de alcanzar es algo más ético que uno presentado por libros como '1984'. En este libro también se harán muchas referencias a clásicos como el que acabo de mencionar y otros tales como 'Farenheit 451', 'El cuento de la criada' o 'Un mundo feliz'. 

Pasando a hablar de los personajes que protagonizarán la historia realmente y que llevarán la voz en los diferentes capítulos os he de decir que están bastante bien construidos. Por un lado tenemos a Zinnia, una mujer que tiene una misión de la que no tiene muchos datos. Es una persona fría, muy fuerte, lo que viene a ser una mujer de armas tomar. Es una espía al fin y al cabo y, por tanto, su carácter es el de una persona calculadora que iremos conociendo poco a poco, aunque a ella le cueste mostrar lo que hay detrás de esa fachada que muestra a los demás. Por otro lado tenemos a Paxton, un hombre que Zinnia definiría como pánfilo y pesado al principio, aunque al final le resultará alguien simpático y con buen corazón. Paxton está en ese sitio por venganza, quiere saber quién y por qué han destrozado su sueño cuando había llegado a conseguir montar una empresa con un invento que le han robado. Ambos son personajes críticos con lo que les rodea (aunque ya veremos que al final no lo son tanto) y ninguno de ellos está ahí por gusto, necesitan el dinero realmente. A pesar de que parece que pueden comprender lo que ese sistema hace con la gente que empieza a trabajar en él, realmente vemos que no lo hacen y terminan como todos los demás, con el cerebro un poco lavado, pensando que lo que les proporcionan es más de lo que conseguirían en un trabajo en el mundo fuera de dichas instalaciones. La historia de cómo se van conociendo es muy bonita, su amistad me gusta, aunque parezca que se va a torcer por el carácter de Zinnia y su poco interés en encariñarse con nadie para poder llevar a cabo lo antes posible el propósito que le han encargado. 

La trama realmente va de cómo Zinnia intentará llegar al fondo, a los entresijos tan ocultos de la organización, aunque esto es solo un hilo superficial mediante el que iremos descubriendo el cómo funciona todo, lo que falla y lo que ha llevado a esa situación. Como os he dicho, creo que lo importante de esta novela es el mundo al que ha llevado la creación de esa empresa tan grande y las consecuencias que el crecimiento de esta ha acarreado al mundo entero, consumiendo y controlando todo lo que conocemos, anulando incluso al gobierno. 

Es una obra bastante buena que nos hará cuestionar cómo funciona el sistema capitalista y el mercado en sí, transportándonos a un futuro que bien podría darse en unos 10 años, algo que realmente asusta. Nos hará volver a pensar en obras como 1984, en el control al que estamos sometidos y nos hará reflexionar con ello sobre la libertad y la capacidad que tenemos (o que nos falta) para decidir.